Controversia del maíz transgénico entre México y Estados Unidos: Marte Vega
Sinaloa, martes 02 de julio de 2024 – Marte Nicolás Vega Román, Presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa, expresa su preocupación y posicionamiento respecto a la reciente controversia sobre el maíz transgénico entre México y Estados Unidos.
Recientemente, la Presidenta Electa, Claudia Sheinbaum, anunció los primeros nombramientos de su gabinete, destacando la designación de Julio Berdegué Sacristán como Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural. En su primera declaración oficial, Berdegué subrayó dos puntos fundamentales de la política agrícola mexicana: fortalecer la seguridad alimentaria del país y mantener la prohibición del uso de maíz transgénico para consumo humano. Aclaró que actualmente, la producción nacional de maíz en México es mayoritariamente de maíz blanco no transgénico, suficiente para abastecer el 100% del consumo humano del país, dijo Vega Román en su columna publicada este día en la cadena de periódicos El Debate.
Señaló que es crucial recordar el decreto del 31 de diciembre de 2020, que además de acciones precautorias para sustituir el uso del glifosato, establecía en su artículo sexto las bases para revocar los permisos de maíces genéticamente modificados, sin especificar si se trataba de uso pecuario o humano. Esta ambigüedad generó preocupación entre los productores estadounidenses, quienes consideran a México su principal cliente.
En respuesta, dijo el líder agrícola que el Gobierno Federal modificó el decreto el 13 de febrero de 2023, aclarando que la restricción se enfocaba únicamente en el maíz para consumo humano, con vencimiento el 31 de marzo de 2024. Además, se recomendaba sustituir gradualmente el maíz importado para consumo animal por producción nacional, una medida que resulta inviable debido a la disminución de la producción de maíz en México en los últimos años. Esto ha llevado a un incremento en las importaciones de maíz amarillo, principalmente de Estados Unidos y Brasil, alcanzando casi 20 millones de toneladas en 2022 y estimándose 23 millones para este año, representando alrededor del 50% del consumo total.
Al vencer el decreto, el Gobierno de México declaró la no prohibición del glifosato hasta encontrar un sustituto viable, sin fijar una fecha límite. No obstante, mantuvo la prohibición del maíz transgénico para consumo humano. Actualmente, México enfrenta una controversia con Estados Unidos y Canadá sobre este tema en el marco del T-MEC, y se espera una resolución definitiva en los últimos meses de este año.
La resolución de esta controversia determinará el curso de la política mexicana sobre las importaciones de maíz transgénico para diversos usos, finalizó el presidente de la CAADES.