Refuerzan acciones en la lucha contra incendios forestales y erosión del suelo por quemas agropecuarias
En lo que va del año 2024, un alarmante 34.7% de los incendios forestales se ha desencadenado debido a quemas agropecuarias no controladas. Este fenómeno no solo pone en peligro la vida de los productores, sino que también conlleva la devastación de ecosistemas y la degradación de suelos.
La incorporación de rastrojo al suelo emerge como una estrategia fundamental. Actuando como una capa protectora, conserva la humedad y previene la erosión causada por factores como el viento y el agua. Este enfoque resulta especialmente beneficioso en periodos de sequía o en áreas donde el acceso al agua es limitado.
El Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, subrayó la importancia de promover prácticas agrícolas sostenibles para preservar la integridad de nuestros suelos. Señaló que, debido a su lenta formación a lo largo de cientos o incluso miles de años, el suelo es un recurso invaluable que no puede ser descuidado ni degradado por prácticas inapropiadas como la quema.
Desde el año 2020, la iniciativa “Mi Parcela no se Quema” ha sido un pilar en la promoción de alternativas al uso del fuego en la producción agropecuaria. Donde sea posible, se fomenta el cumplimiento de la NOM 015, que establece la obligación de notificar sobre quemas de manera oportuna para mitigar cualquier posible incidente.
En aras de reducir la incidencia de estos siniestros a nivel nacional, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural ha intensificado sus esfuerzos en capacitación, concientización y difusión de prácticas alternativas al uso del fuego.
De enero a mayo de 2024, el 34.7% de los incendios forestales se originaron a partir de quemas agropecuarias no controladas. Esto no solo amenaza la vida de los productores y daña los ecosistemas, sino que también erosiona los suelos y afecta el rendimiento de los cultivos.
El suelo, que requiere siglos para formarse, puede perderse y degradarse por prácticas inadecuadas como la quema. Por ello, es crucial promover prácticas agrícolas sostenibles que garanticen la seguridad alimentaria de las comunidades rurales.
El Secretario Villalobos destacó que en esta administración se han implementado programas y acciones en favor de una agricultura sostenible, priorizando la salud y cuidado de los suelos agrícolas, así como el uso adecuado del agua y la promoción de la agrobiodiversidad.
Enfatizó que estas medidas no solo aumentan la productividad, sino que también mejoran el bienestar de las familias rurales, que son el núcleo de la estrategia del sector agropecuario.
Para quienes opten por realizar quemas, Villalobos recomendó hacerlo de manera responsable y cumpliendo con la NOM 015, que establece las especificaciones técnicas para el uso del fuego, con el fin de minimizar los riesgos.
Quemar parcelas incrementa el riesgo de incendios forestales, señaló Villalobos Arámbula. Aunque esta práctica sea ancestral, conlleva graves consecuencias para la biodiversidad y el suelo. En lugar de quemar el rastrojo, se promueve su reincorporación al suelo para proporcionar materia orgánica, retener humedad y reducir la incidencia de incendios forestales.
La incorporación de rastrojo al suelo, mediante diversas técnicas, actúa como una cubierta protectora que previene la erosión causada por el viento y el agua. Además, ayuda a suprimir el crecimiento de malezas al bloquear la luz solar que necesitan para germinar.
A pesar de que el fuego se ha utilizado históricamente para controlar plagas y enfermedades, la difusión de prácticas agrícolas sostenibles ha demostrado que existen alternativas más seguras y eficientes, como el uso de insectos benéficos y técnicas de manejo del suelo.
La NOM-015, de observancia obligatoria en todo el territorio nacional, establece las especificaciones técnicas para el uso del fuego en terrenos forestales y agropecuarios. Para facilitar el cumplimiento de esta normativa, se ha desarrollado la aplicación móvil “Incendios y Quemas México”, que permite presentar avisos de uso del fuego de manera rápida y eficiente.