Ejidataria de Palmitas, solicita urgente pago de cosechas de maíz para alimentar a su familia y sostener la educación de sus hijos
Culiacán, Sinaloa lunes 30 de octubre de 2023. – María del Carmen Ramírez García, ejidataria de la localidad Colonia Agrícola México (Palmitas) en Angostura, se encuentra en una situación desesperada. Acompañada de su esposo y representando a su familia, hace un llamado urgente a las autoridades estatales para que cumplan con el pago de las cosechas de maíz blanco que entregaron hace cinco meses. La falta de este pago está afectando gravemente a su familia, que lucha por sobrevivir.
A pesar de ser campesinos con menos de 15 hectáreas de tierra, la familia de Ramírez García ha entregado sus cosechas y, sin embargo, no han recibido el pago del precio de garantía del maíz, que asciende a $6,965 pesos la tonelada. Esta situación ha llevado a la familia a endeudarse, y los intereses de los créditos están agobiándolos.
“Necesitamos el dinero, necesitamos que nos paguen ya que los créditos nos están comiendo los intereses, no tenemos ahorita para comer, conseguimos crédito y nos suben los intereses, ¿Y de dónde agarramos ahorita? Por eso venimos a esta lucha pacífica”.
Con lágrimas en los ojos, María del Carmen expresó la desesperación que siente al no poder alimentar adecuadamente a su familia ni financiar la educación de sus hijos, quienes están cursando la preparatoria y la educación profesional. La falta de ingresos pudiera ser un obstáculo la continuidad de su preparación académica.
María del Carmen enfatizó que esta lucha no tiene motivaciones políticas. No está afiliada a ningún partido político ni trabaja para el gobierno. Es simplemente una madre de familia humilde, trabajadora y pacífica que busca justicia. Ella espera que las autoridades escuchen su llamado y cumplan con el pago que tanto necesitan.
“Yo no soy afiliada a ningún partido político, ni trabajo para gobierno, yo soy una gente honrada de familia humilde, trabajadora y pacífica, la verdad de corazón les deseo a todos los que nos escuchan que dios los bendiga y primeramente confío que nos van a pagar, dios nos escucha primeramente se hace lo que dios quiere”.
Dijo que esta lucha pacífica es un reclamo justo, y su familia está dispuesta a continuar luchando si es necesario para recuperar la inversión en sus parcelas y asegurar su sustento en el ciclo productivo actual. Su única esperanza es que las autoridades actúen de manera justa y pronta para evitar que su situación empore.
Ramírez García recalcó que la situación de su familia refleja una problemática más amplia que afecta a los campesinos de la región, quienes enfrentan dificultades económicas debido a retrasos en los pagos de sus cosechas. Se espera que las autoridades tomen medidas para resolver esta situación y aliviar el sufrimiento de estas familias.